Buena temperatura y buen aguante.
Después de
ver la exhibición de Tony Martin quedamos en el complejo. Ringo, Óscar y yo.
Fuimos a buscar a Simal, encontrándonos con él llegando a Puente San Miguel. La
idea era subir a Ibio pero el trayecto le decidía yo. Subimos por Helguera y rápidamente
nos metimos en territorio desconocido para parte de ellos. Finalizada la subida
de grija, tuvimos que volver por el mismo camino ya que había perdido las
gafas. No hubo suerte. Volvimos a subir y llegamos a Reocin. Allí les volví a
meter por una zona muy transitada por mi hace años. Se puso Óscar delante y rápidamente
se llevo la primera telaraña por delante, con la mala suerte que le pico el
bicho en la mano. Un buen mordisco por donde salía sangre. Joder con la
arañita.
A partir de ahí cogí yo la delantera y me fui llevando todas las
telarañas por delante para regocijo mío. Toco patear y alguno se quiso volver.
No se puede llevar a gente de ciudad en las salidas. Salimos a la pista que va
de Mercadal a San Cipriano y alguno revivió. Como tenía que ir a buscar a mis
hijas a atletismo no nos dio tiempo a subir a Ibio, el suceso de las gafas nos
atraso. Subimos a buen ritmo y tomamos la bajada a Riocorvo. Simal nos enseño
una roca donde se hace escalada y más abajo se le enredo a Ringo un tronco en
la rueda trasera.
Sin más incidentes, a pesar de lo poco transitable que estaba
la bajada llegamos al barrio. Me despedí de mis compañeros de ruta.
Comentarios
Publicar un comentario