Cura de humildad.
El día de
hoy giraba en torno a la Paella de marisco que iba a comer con unos amigos en
el campo. Antes aproveche para hacer una pequeña salida en la bici. Tenía dos
horas y media como mucho. Me puse adelante del grupo con Enrique y a tirar a un
ritmo ligero. La idea era ir por donde yo dijera y a las once y media en casa y
todos contentos. Marchamos hasta San Vicente para volver por Gerra y salir en
Santillana del Mar. Pequeñas escaramuzas del Vasco por Treceño que yo me
encargue de aplacar yendo a su rueda. En Gerra lo volvió a intentar y otra vez secándole.
Arranco Hevia y me fui detrás. Arriba de Gerra corone yo solo. Después de todas
estas arrancadas y paradas nos colocamos Dailos y yo a la par y con un ritmo
alegre fuimos hasta el repecho de Oreña. En ese momento me dice Dailos que me
ponga a rueda que va a aumentar el ritmo considerablemente. A mitad de cuesta
ya solo quedábamos tres. En ese momento cedí y es que parece ser que todavía no
estoy para sacar el córner y rematar. Lo que si tengo claro es que después de
este fin de semana ya estoy listo para lo que me echen. Eso si voy a tener que dosificar mas los esfuerzos,
porque o son los años o alguno anda más que yo.
Comentarios
Publicar un comentario